10 tips para elegir un seguro de Gastos Médicos Mayores
Una de las reflexiones que deja la pandemia es el tener un mayor cuidado de nuestra salud y también una protección en caso de necesitar recursos para cubrir los gastos por concepto de accidentes o enfermedades.
De acuerdo con cifras de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF), existen 1.9 millones mexicanos que tienen contratado un seguro, de los cuales sólo 27 por ciento cuenta con un seguro de Gastos Médicos Mayores (GMM).
La COVID-19 y sus variantes nos enseñaron que el cuidado de la salud es importante y tener herramientas que nos ayuden a sortear este tipo de enfermedades se convierten en algo fundamental.
¿Cómo elegir un seguro de GMM y qué elementos se deben de tomar en cuenta a la hora de contratarlo?
Aquí te compartimos recomendaciones que debes tomar en cuenta antes de contratar un seguro de este tipo:
- Pregunta por el período de espera. Existe un tiempo establecido en la póliza, a partir de que se contrata el seguro, durante el cual la aseguradora no cubre los gastos por la atención o tratamiento médico de ciertas enfermedades o padecimientos. Por lo que es importante cuestionar sobre el lapso de tiempo que éste contiene.
- ¡Ojo con la preexistencia! Es la enfermedad o padecimiento que se inició antes de la contratación del Seguro de Gastos Médicos y que no están cubiertos por la póliza.
- Anota cuánto es el deducible. Ésta es una cantidad de dinero a partir de la cual la aseguradora empieza a pagar el monto de la reclamación. Recuerda que las compañías de seguros no pagarán accidentes o enfermedades cuya atención o tratamiento implique un monto menor al deducible.
- No te olvides del coaseguro. La mayoría de los seguros de Gastos Médicos Mayores, además del deducible, hacen que el usuario se solidarice con ellos pagando una parte de los gastos, a esto se le llama coaseguro.
- Compara antes de contratar. Como en cualquier producto financiero, lo más recomendable siempre es comparar precios y condiciones. Según la CONDUSEF, lo mejor es tener al menos tres cotizaciones diferentes.
- Un traje a la medida. Con la ayuda de un asesor, averigua cuál es el tipo de seguro más indicado para ti, considerando el que cubre tus necesidades y que esté al alcance de tu presupuesto.
- Siempre lee los contratos, incluyendo las letras chiquitas. Nunca firmes ningún contrato ni documento sin antes haberlo leído por completo. En caso de no estar satisfecho con el alcance de la cobertura que te ofrecen o si tienes dudas que no hayan sido aclaradas por el asesor, busca siempre clarificar toda la información.
- Considera que estás haciendo una inversión. Dicen por ahí que el mejor seguro es el que no se usa, esto refiriéndose a que un seguro cubre accidentes o enfermedades, y siempre es mejor que estos no ocurran. Sin embargo, contratar una cobertura de seguro es una inversión que nos deja tranquilos y protegidos ante cualquier eventualidad.
- Cuestiona sobre el tabulador médico. Éste es el monto máximo por el cual la aseguradora acepta pagar a un médico para determinado servicio. Esto se toma en cuenta en caso de que quieras atenderte con tu médico de confianza o instituciones fuera de las que incluye el seguro.
- No olvides el método de pago. Las aseguradoras pagan los gastos médicos a través de un pago directo, es decir, que ellas corren con los gastos del hospital o hacen un reembolso. En este último caso, es normal que tú pagues y después la aseguradora te devuelve el monto que gastaste.
Ahora que ya sabes sobre estos consejos, no olvides acercarte con un asesor financiero y analizar opciones para contratar tu seguro de GMM. Recuerda que ciertos padecimientos como la COVID-19 pueden resultar muy costosos, alrededor de 500 mil pesos que tendrás que desembolsar en caso de no contar con un seguro.
Por lo anterior y por una mayor cultura de la prevención, es relevante que tengamos un seguro que nos evite mayores complicaciones a la hora de un percance o un padecimiento de salud.